Ahora que nos habla sin permiso el rumor del desengaño y extrañamos el encuentro de dos bocas en un beso
Ahora que las olas traen noticias del naufragio que el rumor de fresca lluvia ya no calma los estragos
Ahora que la rama disidente ya no brota entre el ladrillo y la grieta en la pared nos recuerda las heridas
Ahora que en mi espalada llevo el eco del portazo y la sombra de disculpa se nos pierde en el pasillo
Ahora que descoso el horizonte compartido Y enhebramos sin atino el discurso del cariño
Ahora que no zurces los retales del olvido y no grita nuestra piel al rozarnos sin permiso
Ahora que los besos ya nos son improvisados y la estúpida rutina nos secuestra los excesos
Ahora que los gritos han ahogado a los susurros, que el latido antes vivo, muere ya como cautivo
Ahora ya no planchas las arrugas de mi alma
y la cara del rencor se nos muestra siempre hambrienta
Ahora que te ocultas tras el muro de la cama que la almohada compartida se convierte en barricada
Ahora que descoso el horizonte compartido y enhebramos sin atino el discurso del cariño
Ahora que no zurces los retales del olvido y no grita nuestra piel al rozarnos sin permiso.