Cuentos

Apuestas

Jose Codina

«Con este diseño lograré el triunfo. El papel del grosor adecuado, el bueno, el que utilizamos para mandar las cartas a casa. Dos centímetros del extremo al primer pliegue, cuatro...

Apuestas

Jose Codina

«Con este diseño lograré el triunfo. El papel del grosor adecuado, el bueno, el que utilizamos para mandar las cartas a casa. Dos centímetros del extremo al primer pliegue, cuatro...

Bajo los párpados

Jose Codina

A golpe de culata te sacan de tu agujero. El violento lazarillo guía tus pasos hacia la claridad que traspasa el capuchón. Te preguntas si verás la luz del sol...

Bajo los párpados

Jose Codina

A golpe de culata te sacan de tu agujero. El violento lazarillo guía tus pasos hacia la claridad que traspasa el capuchón. Te preguntas si verás la luz del sol...

Asiento central

Jose Codina

La azafata del mostrador de facturación se limitó a desnudar los dientes teñidos de carmín mientras, en un tono educado y pragmático, me regalaba un inapelable «No. Lo siento caballero,...

Asiento central

Jose Codina

La azafata del mostrador de facturación se limitó a desnudar los dientes teñidos de carmín mientras, en un tono educado y pragmático, me regalaba un inapelable «No. Lo siento caballero,...

Precisión algebraica

Jose Codina

Por su complexión, la joven de la trenza y el escote vertiginoso pesará aproximadamente setenta kilos. Coquetea con la obesidad, aunque viste de negro y eso engaña, quizá setenta y...

Precisión algebraica

Jose Codina

Por su complexión, la joven de la trenza y el escote vertiginoso pesará aproximadamente setenta kilos. Coquetea con la obesidad, aunque viste de negro y eso engaña, quizá setenta y...

Cerca de las nubes

Jose Codina

Al verme avanzar en dirección al ascensor, el pelo de la señora Castrillo, la del sexto B, se eriza como un asterisco y las puntas grises de sus canas salen...

Cerca de las nubes

Jose Codina

Al verme avanzar en dirección al ascensor, el pelo de la señora Castrillo, la del sexto B, se eriza como un asterisco y las puntas grises de sus canas salen...

Margen de error

Jose Codina

Con las yemas de los dedos interrogo la tapa del féretro. Acaricio los relieves de la madera en un intento quizá de decirte que aún sigo ahí, de trazar una...

Margen de error

Jose Codina

Con las yemas de los dedos interrogo la tapa del féretro. Acaricio los relieves de la madera en un intento quizá de decirte que aún sigo ahí, de trazar una...